01 febrero 2009

Las hermosas noches de Wong Kar-Wai

- My blueberry nights - (Wong Kar Wai, 2007)





La aventura norteamericana de Wong Kar-Wai ha sido maltratada desde que se presentó en el Festival de Cannes. Mal distribuida, estrenada de forma clandestina y esas fechas extrañas de final y principio de año. Por eso era lógico verla en un pequeño cine suicida que la ha recuperado en versión original (como debe ser) cuando ya todos la dábamos por muerta. Y la experiencia ha tenido sus frutos. Porque no sólo no me ha irritado la película de Kar Wai sino que My blueberry nights me ha parecido un maravilloso y hermoso cuento.

Empecemos por lo obvio y negativo. A mí tampoco me chifla que el director asiático se dedique a narrar más de media historia en cámara lenta que, a veces, puede poner muy nervioso a uno. Pero aun asi es completamente perdonable. Porque la música, los colores, las miradas, los gestos....hacer de My blueberry nights una maravillosa experiencia para vivir en cine (no, no es lo mismo verla en DVD). En My blueberry nights veremos el Estados Unidos que todos amamos, el país hortera, el de las luces de neón, neoyorquino, con sus bares (y sus borrachos)... Un Estados Unidos, a la vez, real y de cuento con el que o nos dejamos llevar por la hermosura de sus imágenes (como pasaba en In the mood for love) o nos bajamos enseguida de ese viaje de aprendizaje que emprende una maravillosa Norah Jones.

Lo único negativo del film es algo que no se ve. Su escasa duración (96 minutos) hace que pensemos que estamos ante una película cortada a la que le faltan varias escenas. Queremos que Norah Jones viaje más, conozca más gente con el corazón roto y de tanto en tanto vuelva a visitar a su amigo/enamorado, Jude Law. Una película que contiene nombres como Darius Khondji, Ry Cooder, Rachel Weisz (su atractivo en esta película no tiene límites) o Natalie Portman sólo puede ser recomendable. Y esta lo es por hermosa. Tanto como esa escena donde Norah Jones come tarta de arandanos con la canción The Greatest de Cat Power de fondo. Un gran momento.

. Dulces sueños (Fabrizio Castro, Blogestrenos.com)

. Conmoción estética (Javier Ocaña, El País.com)


1 comentario:

Anónimo dijo...

Después de ver el video con las imágenes al menos diez veces entre ayer y hoy he llegado a la conclusión de que no merece la pena añadir nada. O conectas con ese sentimiento o no, porque es tan particular que no podría conseguirse a través de una simple crítica que ensalce las excelencias de la película.
Y por cierto… como tengas un mal día esa canción puede partirte por la mitad.